JOHN-HENRY WESTEN
Río de Janeiro, 29 de Julio de 2013 (Notifam) – En una de sus declaraciones más claramente pro-vida y pro-familia de sus cuatro meses de pontificado, el Papa Francisco se dirigió a una multitud reunida en una cancha de fútbol en el barrio de Varginha, diciéndoles que hoy la fe, la vida y la familia, son esenciales para el “verdadero desarrollo del hombre.”
“Queridos amigos, ciertamente es necesario dar pan a quien tiene hambre; es un acto de justicia. Pero hay también un hambre más profunda, el hambre de una felicidad que sólo Dios puede saciar”. Dijo el Papa Francisco. “No hay una verdadera promoción del bien común, ni un verdadero desarrollo del hombre, cuando se ignoran los pilares fundamentales que sostienen una nación, sus bienes inmateriales: la vida, que es un don de Dios, un valor que siempre se ha de tutelar y promover; la familia, fundamento de la convivencia y remedio contra la desintegración social,” añadió.
No es la primera vez que el Papa habla sobre la vida y la familia en su pontificado. La semana pasada, en un mensaje a los católicos de Irlanda, Escocia, Inglaterra y Gales, el Papa llamó a dejar que la luz de Dios “resplandezca tanto que todos puedan llegar a reconocer el valor inestimable de cada vida humana. Incluso los más débiles y vulnerables, los enfermos, los ancianos, los no nacidos y los pobres, son obras maestras de la creación de Dios, hechos a su imagen, destinados a vivir para siempre, y merecedores de la máxima reverencia y respeto.”
El mensaje del Papa al Reino Unido buscaba promover la Jornada de la Vida. El Papa pidió oraciones porque la Jornada contribuyera a garantizar que la vida humana reciba siempre la protección que le corresponde, de modo que “todo lo que respira alabe al Señor.”
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El Papa ha hablado continuamente sobre la necesidad de transmitir la fe de la mano de la ayuda a los pobres, hace eco a comentarios previos en los que advertía a la Iglesia de no convertirse solo en una “ONG caritativa”.
Durante semanas, los medios de comunicación masiva han recalcado como el Papa Francisco se diferencia de sus predecesores, quienes se rehusaban a hablar abiertamente sobre temas de controversia a nivel mundial como lo son el aborto y el “matrimonio” entre homosexuales.
Al Arzobispo Charles Chaput se le preguntó acerca del fenómeno ocurrido en una reciente entrevista y este respondió: “Creo que el papa ha hablado muy claramente sobre el valor de la vida humana,” pero, “no ha expresado sus sentimientos de una manera combativa. Para mí, temas como el aborto y el significado del matrimonio no son asuntos políticos; son doctrinales y morales. Nosotros los obispos, incluido el obispo de Roma, debemos hablar sobre estas cosas.”
